Cahuita, pura vida!

19 a 21 de Octubre de 2010

Un largo camino entre Boquete y Cahuita, todo el dia viajando: Boquete- David- Changuinola – frontera – Sixaola – Cahuita… pero ha sido uno de los caminos mas chulos. Primero hemos bajado de las montañas de Chiriqui, hacia la zona de Bocas del Toro donde el paisaje ha ido cambiando y hemos pasado entre aldeas, con sus cabañas de madera con techos de palapa. Una pena no poder para en esta zona, de espectaculares playas e islas, es una de las zonas mas turisticas de Panama… pero son exigencias del guion que sigamos hacia adelante.
La frontera, casi podemos decir que una delicia. A ambas partes del rio Sixaola los puestos de Panama y Costa Rica. Y un antiguo puente de tren para cruzar por el rio. Sin colas, y sin esperas, solo nos han pedido prueba de que saldremos del pais, y esta vez estamos preparados con nuestros billetes a Cuba!

Asi y sin darnos cuenta estamos en el Caribe costarricense.
Nada mas llegar a la estacion de Cahuita nos hemos encontrado con Giorgio, un italiano que acaba de abrir el Hostel Sangrila, justo al lado de la estacion. Y con lo nuevito que esta, y el 10% de descuento para españoles, pues aqui nos quedamos. Y bien agusto, todo hay que decirlo.
Cahuita es un pequeño pueblo, con no mas de 4 calles, y un ambiente caribeño y relajado, bien relajado…
Nuestra idea era estar una o dos noches, pero aqui hay algo que engancha, y te dejas llevar: por que no, una noche mas!
Durante nuestra estancia hemos paseado por la playa Negra, como el color de su arena, hacia el norte. Y al seguir nos hemos encontrado con la playa Grande, 15km de interminable arenal negro tambien por su origen volcanico.

Hacia el sur esta la playa Blanca, imaginad que arena y que agua! es parte del Parque Nacional de Cahuita, al que se puede acceder desde Cahuita (pagando solo la voluntad), o desde el sur pagando una entrada. Este Parque comprende la extension de playa y bosque que la circunda, y tambien el arrecife de coral que hay mar adentro.

Nosotros hemos empezado una ruta por la playa Blanca, y seguido por el camino del Parque, entre arboles y palmeras. Hemos podido ver miles de lagartos, monos aulladores y monos de cara blanca, y hasta un mapache!

Y hemos disfrutado de una playa para nosotros solos en Punta Vargas… PURA VIDA! como dicen por aqui para saludar y decir que todo esta bien.

Aqui tambien nos hemos encontrado con Rosa y Roman, una pareja de viajeros empedernidos, con los que hemos disfrutado de unas cervezas e intercambiado vivencias y viajes…ellos nos llevan bastante ventaja y es una delicia escuchar sus peripecias.
Hay un par de cosas de Cahuita que merecen la pena que comentemos. Una son los mosquitos. Desde que hemos empezado el viaje han sido nuestros fieles compañeros, pero aqui es increible como pican los muyc… Cualquiera que venga por aqui no se arrepentira de traer varios litros de repelente.
El otro tema es una delicia, y es que el despertador natural de Cahuita no son los gallos, sino los monos aulladores que cada mañana a las 5 a.m. hacen un gran escandalo. Segun nos han contado es para marcar su territorio, y es algo que hacen los machos (no comment, verdad).